Durante la semana, han tenido varias charlas informativas y talleres, y las jornadas se han dividido en cinco itinerarios diferentes: Biosanitario, Politécnica, Comunicación, Jurídico empresarial y Humanidades.

Inés Angulo ha sido una de las alumnas que ha participado en estas jornadas y nos ha contado cómo ha sido su experiencia.

“Nos ha ayudado a darnos cuenta de lo importante que es la elección de nuestra carrera”
Ha sido una semana que todos llevábamos esperando mucho tiempo, ya que desde que éramos más pequeños siempre veíamos a los mayores del colegio formar parte de la experiencia, y verles tan entusiasmados después de acabar la semana nos llamaba mucho la atención. Sin embargo, este año ha sido muy distinto, debido a la pandemia que estamos viviendo. Como no hemos podido ir de forma presencial a los trabajos, el colegio nos ha brindado la oportunidad de vivir de una nueva forma esta semana; haciendo las charlas de forma telemática.

A pesar de no haber podido conocer de primera mano como es de verdad trabajar, hemos hecho un gran esfuerzo para aprovechar esta experiencia. Cada alumno eligió el itinerario que le podía interesar más o incluso los departamentos sobre los cuáles tenían dudas de cómo eran. Allí nos dieron a conocer cómo es la formación de diferentes carreras e incluso lo que con ellas nos depararía el futuro.

“Cada vez tengo más claro qué quiero ser”
El primer día fue el menos didáctico, y eso hizo que viniéramos al día siguiente con muchas más ganas de entrar a los talleres y exprimir todos los contenidos posibles. Al día siguiente, cuando salimos de los talleres, se podía escuchar por los pasillos murmullos de nuestros compañeros sobre lo que más les había gustado, diciendo: “Cada vez tengo más claro que quiero ser” o incluso “ he descubierto que esta carrera que tanto me gustaba no era como esperaba”. Ayudó mucho para poder hacerse una idea de lo que querías descartar y lo que verdaderamente te gustaba.

El tercer día, todos llegábamos al colegio con una gran actitud para comenzar un día nuevo afrontando los dos talleres de ese día, uno más teórico en el que resolvíamos nuestras dudas universitarias y otro más dinámico donde todos podíamos participar de una forma mucho más interactiva.

Aprender de las caídas
El penúltimo ya se notaba que era jueves. Lo que nosotros no imaginábamos es que aprenderíamos consejos que nos serían útiles no solo para el ámbito del trabajo sino para todo lo referente a lo personal. Lo que nos hizo darnos cuenta de lo importante que es la elección de nuestra carrera y nuestro trabajo en nuestra vida.

Finalmente, el último día fue el que más nos impactó y nos gustó ya que, aunque no fuesen charlas sobre la carrera, vino un joven a darnos su testimonio. Nos abrió los ojos cuando pensábamos que no podíamos aprender más, y nos sorprendió enseñándonos que aunque la vida te de muchos golpes nunca vas a estar solo y que siempre hay que levantarse y aprender de tus caídas.