Fue un retiro breve porque se trató de una Misa y Adoración el viernes, y unas horas de la mañana del sábado también con Adoración, charla, dinámica, testimonio y Misa. El aforo del 30% para actos de culto permitió recibir a 57 servidoras, que fueron, providencialmente, las que se apuntaron.
El P. Manuel Aromir L.C y Mercedes Castañera, consagrada del Regnum Christi, prepararon todas las meditaciones, charlas y dinámicas en torno a la Parábola de los talentos, que fue bien recibida por unas servidoras con ganas de ‘servir’ y estar juntas, porque son una gran familia en la que Jesús es el centro. Todas coincidieron en que les había hecho mucho bien este retiro para descansar del pesimismo y de los problemas de salud y económicos que nos pueden acechar en estos tiempos.
Dominique Cugueró e Isa Parellada son servidoras de Emaús en Santa Isabel y han contado al Regnum Christi su testimonio sobre este retiro.
«El programa empezó el viernes, con una Misa y un rato de Adoración con una meditación del P. Manuel Aromir, L.C., sobre la belleza de las personas ante los ojos de Dios, que ha regalado tantos talentos para ayudar y servir a los demás. Esos talentos van desde cosas materiales, salud, la familia… hasta habilidades concretas en las que destacar. Como obra del Señor, cada una de nosotras es valiosísima. Destacaríamos las palabras del P. Manuel que nos dijo que se imaginaba el momento de nuestra muerte y que sería un espectáculo de Amor, porque vivimos para servir. Nos hizo reír, pero supimos captar la belleza del comentario. Como hay toque de queda en Barcelona, fue cortito, pero salimos todas con ganas de más.
A la mañana siguiente empezamos con la Exposición del Santísimo que nos acompañó hasta la hora de la Misa. De nuevo el P. Manuel nos habló de los talentos, pero esta vez leyendo la Palabra de Dios y desgranando esos detalles que a veces a nosotras nos pasan desapercibidos.
También, Mercedes Castañera nos preparó una dinámica en la que nos alentó a descubrir esos talentos, algunos aún ocultos, por lo que también la ilusión por descubrirlos nos guiaba. Preparó un cuestionario en el que nos hizo pensar, por ejemplo, en esas actividades que nos apasionan y durante las cuales el tiempo nos pasa volando o cuando sentimos que somos realmente nosotras. Nadie dudó de que el Señor estuvo participando como Maestro y Amigo, susurrándonos lo bellas que nos veía, y haciéndonos notar aquello en lo que nos ha bendecido.
Después rezamos el Ángelus y un Rosario a María.
A continuación el P. Joaquín Petit nos dio su testimonio de cómo había empezado todo el proyecto de Emaús en el Real Monasterio Santa Isabel. Destacó todos los frutos de estos retiros que él ha visto durante estos años y que le hicieron entender que el Señor tiene prisa por llegar a los corazones. Emaús es sin duda un milagro de Amor del Señor en un retiro único de fin de semana.
Después de la bendición final preparamos la Misa dedicada a la Madre de Dios con mucha ilusión, y para acabar repartimos un imán con la imagen del Sagrado Corazón que nos acompaña en todos los retiros en Sant Julià de Vilatorta, donde esperamos poder volver pronto para acercar muchas más almas a Dios para que las invada con su Amor».