Cristina Peiró y Miguel Ángel Martínez.- ¿Por dónde empezar a hablar de lo que ha supuesto para nosotros el seminario de Sponsus que ha creado don Renzo Bonetti? Si la gente supiera la magnitud de la importancia que supone la vocación a la que hemos sido llamados, esto estaría en todos los rincones y parroquias del mundo como una necesidad muy demandada por la Iglesia. Ojalá algún día. El día que hicimos Sponsus supuso un antes y un después en nuestra vida y en nuestra fe. Pero sobre todo en nuestro matrimonio.

Orar en matrimonio es el amor elevado a otro nivel

Vida, fe y matrimonio

En nuestra vida porque te encuentras de repente con una realidad que no nos ha sido jamás contada y de repente todo encaja. En nuestra fe porque hemos vivido y descubierto la verdad del amor de Cristo que está vivo en nosotros y nosotros en Él. Nos sentimos amados como nunca antes siendo uno con Jesús Esposo. Y en nuestro matrimonio porque de esa unión nace una nueva creencia de la necesidad de la oración en la intimidad de la pareja entregándonos al Esposo que se entrega cada día por nosotros. Orar en matrimonio es el amor elevado a otro nivel. Que alegría más grande saber que juntos somos el reflejo del rostro de Jesus en la Tierra.

El subidón de haber encontrado algo que no sabías que tenías que encontrar

No contento el Señor con la gran bendición que nos regaló al hacer este seminario, el Espíritu Santo actúa en nosotros y nos da la oportunidad de vivir un día en comunidad y convivencia con don Renzo. Recibimos de él todas las luces necesarias para aumentar nuestro amor a nuestro matrimonio en Cristo. Ha sido un regalo que nunca olvidaremos, un subidón de haber encontrado algo que no sabías que tenías que encontrar.

Como al principio

Don Renzo nos ha hecho volver a ese enamoramiento del principio. Pero con Dios trino como referencia perfecta de nuestro matrimonio, con Jesús Esposo en el centro y ya no podemos amarnos solos, nos sabemos amados eterna e incondicionalmente el uno por el otro porque es así como Jesús nos ama. Estamos muy agradecidos al Regnum Christi por esta oportunidad que nos han dado para crecer en la fe y saciar la sed de acercarnos juntos como matrimonio y como familia a Dios.