Fotogalería y entrevista | 25 Aniversario de consagración de Paulina Nuñez: “Decir ‘sí’ es apostármelo todo sabiendo que voy a ganar”

LomásRC

10/09/2024

Paulina Nuñez cumplió 25 años de vida consagrada en el Regnum Christi el pasado 21 de agosto de 2024. La celebración fue el 4 de septiembre en la capilla Sedes Sapientiae de la Universidad Francisco de Vitoria. Paulina estuvo rodeada de la familia Regnum Christi y amigos que quisieron acompañarla en este día tan especial. Hemos hablado con ella y nos ha contado que su ‘sí no es a una causa “sino a una persona, que después ya me comparte sus causas y sus intenciones”.

Fotogalería de la celebración del 25 aniversario de Paulina Núñez

Han pasado 25 años después de aquel ‘sí’… ¿En qué consiste decir ‘sí’?

Para mí decir ‘sí’ es responder. La respuesta por antonomasia es un ‘sí’, un ‘sí’ grande, por lo cual hay unos ‘síes’ más pequeños. Decir ‘sí’ es dejarme llevar muy activamente en la decisión y muy pasivamente en la gestión. Ver qué me ofrece Jesús y saber que siempre me está invitando a algo a lo que puedo o no responder…

Paulina Núñez, renueva sus votos ante Betty Rivera, directora territorial de las consagradas del Regnum Christi en España.

Doy un salto al lleno, aún así con vértigo, con mis humanas dudas, limitaciones, negociaciones… porque somos mezquinos. Pero gracias a Dios somos mezquinos, muy amados, y muy redimidos.

Decir ‘sí’ es apostármelo todo sabiendo que voy a ganar. Y eso es tremendamente liberador y profundamente esponsal. Sé que le digo que sí no a una causa, sino a una persona, que después ya me comparte sus causas y sus intenciones. Pero la misión, aunque sea un elemento fundamental, al mismo tiempo también es una consecuencia.

Decir ‘sí’ es dejarme llevar muy activamente en la decisión y muy pasivamente en la gestión

¿25 años pueden resumirse en una palabra, un versículo de la biblia, un pasaje del evangelio, una canción…?

Si pudiera resumir estos 25 años sería con dos palabras: “Asombro agradecido”. Siempre me vuelve a brotar el asombro y la gratitud ante lo que veo… y la gratitud aumenta el asombro y el asombro aumenta la gratitud.

También los resumiría en el libro de Ezequiel, en el pasaje donde el Señor le enseña a su profeta que todo aquello donde parece que sólo hay huesos misteriosamente unidos, y Él insufla vida con su soplo. Esto nos enseña que Dios puede poner vida donde Él quiera, y nuestra suerte, nuestra bendición, es que nosotros no tenemos que dar vida, sólo ser custodios de esa vida que Dios da, tanto dentro de mí como en las personas que tengo el regalo de acompañar y con quienes crear comunidad y amistad también.

Del Evangelio recuerdo la experiencia de paz y de seguridad que me dio leer el pasaje de Juan 21, 17: “Tú lo sabes todo, tú sabes que te amo”. Me me dio mucha paz, con tan solo seis añitos… y obviamente me tardé muchos años en entender el contexto del pasaje. Pero sí entendía que eso era de hablar con Dios, y eso creo que es una línea fundamental de mi vida espiritual y, por lo tanto, también después de mi consagración.