Regnum Christi España

Juan María Larrañaga Ysasi-Ysasmendi

Laico consagrado del Regnum Christi, de 57 años, ha fallecido este 24 de diciembre de 2024 a consecuencia de complicaciones de una infección y neumonía. Ha entregado su vida por el Reino de Cristo desde la cruz de la enfermedad.

El Señor me lo dio, el Señor me lo quitó; bendito sea el nombre del Señor. Job 1, 21

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Conoce un poco más a Juan Mari en esta breve reseña biográfica

Les invitamos a encomendar a Juan María en su encuentro cara a cara con el Señor para toda la eternidad.  ¡Descanse en paz!

Se le velará en el tanatorio de Pozuelo (Madrid), donde se celebrará una misa a las 13:00

Puedes dejar aquí un mensaje a la familia, expresar tus condolencias, compartir algún recuerdo de Juan María…

26 comentarios en “Juan Maria Larrañaga Inmemorian”

  1. Juanmari: Gracias por tu testimonio. Solo te recuerdo sonriendo. Dios te bendiga siempre, no dejes de ayudarnos y contágianos tu sonrisa y tu santidad.

  2. Me uno a las oraciones de todos por nuestro hermano de consagración Juan María. Fiel a Cristo y con su entrega nos alcanzó muchas bendiciones y ahora más. Gracias Jesús por este hermano bueno y fiel a ti.

  3. José Miguel Mohedano Martínez

    Gracias Juan Mari por tu testimonio de vida y por los años que compartimos en la sección de jóvenes en Madrid, junto con Pablo Conde, Jorge García… Fue un regalo conocerte. Te pido que desde el cielo acompañes a tu familia y a tus hermanos en el RC para que nos sigas guiando con esas virtudes que tu encarnabas. Descansa en paz amigo.

  4. Juan Mari fue un gran testimonio de amor, entrega, sacrificio, esfuerzo y entrega a la misión. Siempre cercano y siempre acompañando con su oración y el ofrecimiento silencioso de su enfermedad. Sin duda un gran constructor del Reino. Gracias por tanto Juan Mari. Un abrazo y mi cercanía espiritual a su familia y a la comunidad de Madrid.

  5. Diego de Robina Rabasa.

    Conocí a Juan Mari personalmente cuando fui el entonces Asistente del director general para la Vida Consagrada Masculina. Lo fui a visitar varias veces a su casa y a partir de ahí se forjó una hermosa amistad y hermandad, no solo en nuestra consagración común a Dios a través del Regnum Christi, sino que nos unieron muchos momentos y circunstancias.

    No puedo expresar lo que su fortaleza, esfuerzo y lucha; su semblante siempre alegre y sonriente; su actitud de vida, su anhelo por dedicarse a quien tuviera delante de sí (físicamente o virtualmente) a pesar de sus dificultades y sufrimientos; su amor y devoción a Dios, su dejarse hacer por Él, su capacidad extraordinaria de ver a Dios en todas las cosas, también en sus dolores y sufrimientos y asumirlos como un plan amoroso del Señor para él.

    Un verdadero apóstol incansable. Un testigo fiel del amor de Dios que superó todo limitante. Nos demostraba con creces que se puede ser misionero ante cualquier circunstancia, dificultad, temor, enfermedad. Juan Mari nunca tuvo un límite, nunca se dejó llevar por nada, siempre amando.

    Dios nos bendijo con su vida enriqueciendo al Regnum Christi, y especialmente a los consagrados que tuvimos la gracia de tenerlo como hermano.

    Juan Mari, ya estás donde te mereciste estar, te ganaste la corona y el mismo Jesús te la puso al recibirte como «siervo bueno y fiel». Gracias por tu vida que a tantos nos enriqueció. Juan Mari fuiste un reflejo fiel del amor del Padre; fuiste su perfecta imagen y semejanza.

  6. P. Oscar Sanchez, LC

    Agradezco a Dios nuestro Señor el haber conocido a Juan Mari. Durante un par de años fui su confesor; después de estar con él, siempre salí renovado y edificado. Me impresionaban mucho su amor a Dios, su paciencia, su carácter, su buen humor, y su afición férrea al Real Madrid!

    Conocí también a sus padres: Juanjo siempre me recibía con afabilidad y sus palabras transmitían fe y mucho amor por su familia.

    ¡Descanza en paz, Juan Mari! Que el buen Dios te tenga muy cerquita de su Corazón, y que te conceda seguir intercediendo y entregándote por las almas.

  7. Gracias Juan Mari, por tu testimonio callado de ofrecimiento al R.C. y a tu familia durante muchos años. El Señor te regaló la vida en medio de una extraordinaria familia que te amó y, por tu parte generosamente, ofreciste tu vida y tu dolor por los demás. «Nadie tiene más amor que aquel que da la vida por sus amigos. Vosotros sois mis amigos si haceis lo que os mando» (Jn 15 12-13). Con una resiliencia admirable y un sentido espiritual ejemplar, nos has marcado el camino para ser amigo de Cristo. Estos 17 años como laico consagrado del Regnum Christi han sido una ofrenda agradable al Señor que ilumina el mejor camino a la santidad: permanecer en el amor de Jesús. Que desde el cielo en esta hermosa Noche Buena, tu ofrenda de vida se encuentre en el pesebre con Jesús Niño y la Virgen. ¡Gracias Juan Mari por mostrarnos, a los laicos consagrados del Regnum Christi, el camino de la fecundidad espiritual!
    Y una oración especial en esta Navidad, por tu hermana Almudena, su esposo y tus sobrinos, que te acompañaron con amor y virtud.

  8. Querido Juan Maria. Misionero de corazón. Ejemplo para todos. Amante de la misión evangelizadora De la Iglesia. Gracias por tu vida y tu testimonio. Que disfrutes del Señor en la vida celestial.

    GRACIAS. Descansa en Paz.

  9. Tuve la gracia de poder llamarlo mi amigo! Un hombre extraordinario! Que interceda por nosotros y disfrute de la gloria

  10. María del Rosario Guerra Fausti consagrada del RC

    Gracias Señor por la vida y consagración de Juan María, gracias por su familia que lo han acompañado y por la familia de los consagrados. Juan María abre la puerta santa en el cielo. Te pido Señor consuelo para su familia y consagrados del RC en esta partida

  11. Verónica Alvarez de la Cadena

    Hermano en Cristo, Juan María, no tuve el gusto de conocerte personalmente, estoy segura de que he recibido abundantes bendiciones a través de tu ofrecimiento y oración. Te pido que sigas intercediendo por cada uno de tus hermanos que militamos y peregrinamos rumbo a la casa del Padre, Dios te Bendiga con su presencia, nos vemos en el cielo, Vero

  12. Gracias Juan Mari por tu vida ofrecida y entregada al Señor. Gracias por enseñarnos qué el mejor apostolado esta en lo profundo de nuestro corazón, en lo oculto que solo Él ve, en la sencillez y la humildad que solo Él nos puede dar. Encomiendnos desde el Cielo!!

  13. José Mateos, laico consagrado del RC

    Me uno en oración en acción de gracias a Dios por el invaluable valor de la vida de Juanmari; sólo en la eternidad seremos capaces de comprender la profundidad y alcance de su vida entregada por amor a Dios, al Regnum Christi y a los hombres. Me alegra pensar en el abrazo eterno con que Dios lo ha recibido en el cielo y ha premiado su vida de paciente sufrimiento y alegre entrega a los demás.

    Elevo también mis oraciones por su eterno descanso y la fortaleza y paz para toda su familia y quienes sufren su ausencia. Dios premie a cada uno de los que estuvieron cercanos a él.

  14. Una grande persona pero, sobre todo un gran consagrado que hizo de su enfermedad un altar donde ofrecia sus sacrifícios por las almas. Un gran apóstol de Cristo que buscaba transmitir a Dios a todos. Descansa en paz Jun Mari

  15. Los Misioneros Permanentes del Regnum Christi nos unimos en oración por el eterno descanso de Juan María. Descanse en La Paz del Señor y brille para él la luz perpetua.

  16. Queridos consagrados, cuanto me apena saber esta noticia. Lo siento mucho! Rezo por el eterno descanso de Juan María y pido a Dios por su familia, por ustedes que hoy lo despiden. Que Dios, Señor de la esperanza, los llene de consuelo y esperanza en la vida eterna. Mi más sentido pésame.

  17. Jaime Pérez Guajardo

    Juan Mari es un testigo de la fe y el amor a Jesucristo con quien supo compartir alegremente la cruz amando con autenticidad a todos. Dios le premie y le conceda segui intercediendo especialmente por quienes sufren la soledad.

  18. Querido Juan Mari, ya tu sonrisa ilumina el cielo y es permanente. Ya llegó tu Navidad! Gracias por el testimonio de tu vida: tu lucha, tu humor, tu aceptación, tu oración!
    Me uno en oración a tu familia y a tus hermanos laicos consagrados.
    Cuida de nosotros, junto con Maria, hasta que nos podamos encontrar en tu nueva casa!

  19. Me uno con mi oración pidiendo por su eterno descanso y por todos los laicos consagrados. Que han permiso un hermano y compañero de camino.
    Les mando un abrazo fraterno

  20. Mis sinceras condolenciasa toda la familia. Qué el Niño Jesús los consuele a todos y qué Juan pueda gozar de la presencia de Jesus Eternamente
    Con mis oraciones,

  21. Manuel Cordero Arjona

    Gracias, Juan Mari, por tu ejemplo de amor apasionado a Cristo y un celo apostólico que iba mucho más allá de tus limitaciones físicas, de amor a la Eucaristía y a la Santísima Virgen. Que Ella te acoja en su seno y te dé el merecido descanso en el Señor. Intercede por los laicos consagrados y por todo el Regnum Christi.

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