• El propósito de talvezteayude surge tras mi encuentro con Cristo donde dejé de ver para empezar a mirar.
• Quiero sacar a los jóvenes de la indiferencia y del conformismo, que tanto daño nos está haciendo.
• “Me inspira saber que estoy llamado a la santidad, me inspira sentir todos los días mi debilidad y saber que necesito ayuda de Dios, yo no puedo solo”.

En Talvezteayude un joven puede encontrar frases, reflexiones y vídeos… Ciertamente no sigue un patrón, ni una estructura, ni un calendario. “Necesitamos menos ídolos y más referentes. ¿Estoy con ello diciendo que soy un referente? No”, nos cuenta Alvaro Quesada en esta entrevista. “Te estoy diciendo a ti, a quien está leyendo esto, que el referente seas tú, dentro del marco de tus posibilidades, en tu entorno y con los que compartes los días. ¡Se un evangelio vivo para los que te rodean! De eso trata el contenido de talvezteayude”.

¿Cómo surgió “talvezteayude”?

No me atrevería a decir que talvezteayude comenzó siendo una idea. La historia de talvezteayude es profunda y personal. De todas maneras, lo que comenzó siendo un “bloc de notas” personal, acabó por ser lo que talvezteayude es ahora: un apostolado de un joven que quiere cumplir con su llamada a ser instrumento de Dios.

El propósito de talvezteayude surge tras mi encuentro con Cristo donde dejé de ver para empezar a mirar. Sentí que tenía que dar a conocer a Cristo de manera auténtica, sencilla y natural, no me lo podía quedar para mí solo y ya no podía esperar más. No sentí miedo, de hecho, me sentí tan acogido y apoyado por Dios que no daba importancia a lo que se pudiera opinar. Ahora era algo entre Dios y yo, Padre e hijo, una relación trascendental, algo que a día de hoy aún no soy capaz de comprender racionalmente, ¡jaja…! Fue en ese punto de mi vida donde quise dejar de vivir de cara a los hombres para vivir de cara a Dios. Me sentí libre.

Tenía el deber de volver a la cueva de donde salí y contar lo que había visto afuera, mejor aún, lo que había vivido”.

¿Cuál es el objetivo del perfil?

Quiero, a través talvezteayude, dar a conocer a Cristo no mediante una teoría, sino un testimonio de vida, tal y como Él lo hizo con nosotros. Hacer ver a Dios como un verdadero amigo y no como un Dios castigador y Señor de las “restricciones”. Quiero sacar a los jóvenes de la indiferencia y del conformismo, que tanto daño nos está haciendo. Quiero además suscitar en los jóvenes la necesidad de conocer al capitán del barco en el que por gracia de Dios ya están subidos, y que de esta forma se sientan seguros de que ese barco no se volverá a hundir aunque las olas de este mundo nos hagan sentir lo contrario.

En definitiva, talvezteayude tiene muchos objetivos que giran en torno a un objetivo principal imperante: hacer crecer el Reino de Cristo entre la comunidad de jóvenes.

¿Por qué lo has creado?

Tal y como hemos oído hablar en el popular “Mito de la Caverna”, podría decirse que yo, al salir de la cueva, me he encontrado con una realidad nueva. Una realidad que me ha hecho libre, una realidad que me ha devuelto las ganas y la ilusión, una realidad que me ha enseñado a vivir y amar en mayúsculas. Esa realidad es Jesucristo. Ahora que estoy experimentando que vivir la fe es posible, es la hora de hacerlo ver. En otras palabras, metafóricamente dicho, sentía que tenía el deber de volver a la cueva y contar lo que afuera había visto, mejor aún, lo que había vivido.

Por eso nace talvezteayude, de hecho, esa es la razón por la que esta cuenta se llama “Tal vez te ayude” y no se llama “Te va a ayudar”, por ejemplo… ¡jaja…!

Me inspira ver la cantidad de jóvenes que quieren vivir como yo, que tienen una misión en la vida donde Cristo está en el centro.

¿A que animas a los jóvenes?

No puedo parar de pedir a los jóvenes que no tengan miedo a ser felices. Les animo a que siempre traten de buscar el camino que les lleve a encontrar la verdad para que puedan vivir una vida plena y coherente con ellos mismos. Les animo a que busquen el amor verdadero, el que se escribe en mayúsculas, y se atrevan a hacerse pequeños para sentirse hijos amados. Esta sociedad demanda amor, y mucho. Mucho amor se nos dio en la cruz y mucho amor tenemos para dar. Os animo a que siempre tratéis de ser auténticos aunque cueste a veces, a que no os dejéis engañar y dejaros llevar por el “todo el mundo lo hace” y establezcáis vuestro propio criterio.

Y que sepáis todos y cada uno de vosotros que: ¡La santidad no se pasa moda! La santidad es un anhelo de tu corazón, así fue diseñado.

¿Qué te inspira día a día para llevar la cuenta?

Me inspira levantarme todas las mañanas con ganas de vivir y de seguir creciendo en comunión con lo que me rodea. Me inspira saber que estoy llamado a la santidad, me inspira sentir todos los días mi debilidad y saber que necesito ayuda de Dios, yo no puedo solo, suficiente me lo he demostrado. Me inspira saber que al Cielo nos vamos juntos y que mi fe no la puedo vivir por mi cuenta, necesito compartirla y seguir contagiándome.

Me inspira saber que no soy diferente y que al igual que todos yo también tengo mis dudas y mis miedos, que yo también me caí y no supe como levantarme, que yo también cometí errores y no pude enmendarlos. Yo también estuve ahí, y me inspira saber que lo que yo estoy viviendo hoy lo puede vivir cualquiera.

Me inspira ver la cantidad de jóvenes que quieren vivir como yo, que tienen una misión en la vida donde Cristo está en el centro. Me inspira sentir que no estoy solo y que tengo un apoyo incondicional que me mantiene en pie. Por si fuera poco, me inspira aún más, saber que esto no lo he escogido yo, y que tan solo he respondido “Sí” a una llamada a la verdad, la libertad y el amor perpetuo.