En su reflexión, el P. Marcelino explicó a las parejas participantes que en su matrimonio se convierten en “partícipes de la paternidad de Dios”.
“En cualquier acto de amor humano está Dios, puesto que participamos de su amor, y en donde nuestra misión como padres consiste en ser administradores de su amor hacia los hijos: ellos, gracias a nuestro amor, conocen el amor de Dios”, señaló. En este sentido también explicó que “Dios se ha comprometido con nosotros, y cuando Dios da una misión, también da la fuerza para llevarla a cabo”.
Como en años anteriores, Slow Love tuvo lugar en Cumbres School Valencia, y es parte de la pastoral familiar del Regnum Christi en esta ciudad.