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Mari Luz Guasch es una joven de Regnum Christi de Valencia que participó en la gran Vigilia Diocesana en el Centenario de la Coronación de la Mare de Déu. Nos cuenta que en la Vigilia “y en presencia de nuestra imagen de la Virgen, muchos fieles llenamos la plaza de toros de Valencia: empezamos la tarde con la Virgen bañada por el sol, y ante su presencia escuchamos testimonios, rezamos el rosario, adoramos al Santísimo, para despedirnos bajo la luz de la luna, al son de aclamaciones”. Por su parte, Inelén nos reconoce que después de asistir y colaborar en este encuentro tiene más ganas “de seguir remando en esta barca que es la Iglesia de la mano de nuestros hermanos”, como nos cuenta en esta entrevista.

¿Qué te parece, como miembro del Regnum Christi, y directora en Valencia, vivir esta experiencia mariana junto a toda la diócesis?

Fue una experiencia preciosa, de sentirnos Iglesia, familia, reunidos en torno a Nuestra Madre, todos hijos, con los mismos apellidos. Hubo varios momentos en que, mirando a mi alrededor, viendo a tanta gente aclamando a la Virgen, de rodillas adorando a Cristo en la Eucaristía, cantando, alabando, a sacerdotes imponiendo las manos tras conceder el perdón… pensé: ¡¡esto tiene que ser muy parecido al Cielo!!

Todos hijos, con los mismos apellidos… ¡muy parecido al Cielo!

¿Después de este evento, qué te pide la Virgen hacer por el Regnum Christi y su misión evangelizadora?

Me pide más. Más de esto, de seguir dando gloria a Dios, de seguir trabajando para que este encuentro llegue a más gente, de que haya más, de seguir remando en esta barca que es la Iglesia de la mano de nuestros hermanos.

Me pide más de esto: más de dar Gloria a Dios, más de seguir remando en la barca de la Iglesia de la mano de nuestros hermanos