Este apostolado ha nacido dentro del Regnum Christi con la vocación de redescubrir la Teología del Cuerpo del Papa San Juan Pablo II. Jóvenes, sacerdotes, consagradas y ponentes han podido escuchar estas catequesis sobre el amor humano que se han compartido durante el fin de semana.

Julia Parias es una joven que ha participado en el encuentro de Yiós Weekend en Sevilla y ha querido compartir su experiencia con nosotros, ya que le ha dejado “muchas bendiciones”. Lo que tiene claro es que, después de este encuentro, quiere vivir “un amor ordenado”.

No llegó en el mejor de los momentos y afrontó los días con algo de tristeza. “Pasarme días completos hablando de Amor no me animaba porque mi vida sentimental no atravesaba el mejor momento”, nos explica.

Aun así, Julia nos comenta que Dios siempre pone “las cosas en camino” cuando uno más lo necesita, y para ella todo esto fue un regalo. Con estas catequesis de Juan Pablo II sobre la sexualidad y el amor humano, se les expuso una forma de vivirlo que “no deja indiferente”, es decir, “amando con el cuerpo y el alma, reverenciando y cuidando lo espiritual y lo corporal”.

En una sociedad donde todo va acelerado y es caótico e individualista parece que el amor tiene que seguir la misma dinámica. “Parece que tiene que ser algo rápido, donde nos probamos y no nos comprometemos, donde nos vemos en lugar de mirarnos y donde no hay espacio para la espera, porque ‘la vida es una y vuela’”, explicó. Además, que el amor no es solo una emoción que cuando desagrada se puede desechar.

Es posible que uno se sienta solo y extraño frente a todo esto, sobre todo cuando apuestas por “el amor casto y pausado”, que se convierte en una decisión que se toma cada día y no como “una emoción pasajera”. Sin embargo, gracias a su experiencia del Yiós Weekend, Julia ha reconocido que definitivamente los jóvenes no están solos. “Hay muchos jóvenes que anhelan un amor ordenado que nazca de Dios y lo refleje”, nos explica.

Otro de los aspectos que han abordado en esta experiencia ha sido el amor de Dios. “Buscamos amar de la misma manera que nos sentimos amados por Dios. Buscamos mirar a las personas y reconocerlas, ante todo, como hijos y amados de Dios, y por ello ofrecerles un amor que los eleve más a Él”, indica Julia. También es importante mirar a esa persona especial y ser capaces de decirle: “Quiero ser Cristo para ti, quiero entregarme a ti como Cristo se entrego a la Iglesia, una entrega desinteresada y total”. “Cuando realmente te reconoces profundamente amada por Dios, buscas amar de la misma manera y anhelas que te amen también de esa forma”, comenta.

Este camino no es fácil, pero que “lleva hacia el amor con mayúsculas y no defrauda”. “De corazón recomiendo a todos los jóvenes que sintáis que vais contracorriente vivir esta formación de Yiós Weekend, y os digo que luchéis por este amor ordenado que nos acerca más a Dios y a aquellos a los que amamos”, pide finalmente Julia.