En palabras de Marilú Álvarez, consagrada del Regnum Christi e Instructora de formación integral de Bachillerato en el colegio, “el propósito es ayudar a los adolescentes, mediante una persona formada y preparada, para que se abran en un diálogo con confianza sobre este tema que les preocupa, pudiendo resolver dudas y recibir orientaciones desde una perspectiva adulta y responsable”. Los encargados de impartir el taller han sido Rosario Pelayo Torrent (en la imagen de portada) y José María Evangelista. A continuación te ofrecemos una entrevista con Marilú.
¿A qué cursos y edades se imparten?
El Proyecto de Educación Afectivo Sexual Aprendamos a Amar se ha impartido a los alumnos de 1º y 3º de la E.S.O y 1º de Bachillerato. El propósito de este proyecto es ayudar a los adolescentes mediante una persona formada y preparada en la educación afectiva y sexual, para que los alumnos se puedan abrir en un diálogo con confianza sobre este tema que les preocupa, pudiendo así resolver dudas y dar orientaciones desde una perspectiva adulta y responsable.
¿Y en qué han consistido estos talleres?
Los alumnos han recibido cuatro sesiones preparadas en base a un cuestionario inicial de interés previo que han respondido individualmente y de forma anónima para ver qué preguntas e inquietudes tienen nuestros alumnos. Al final de las sesiones se comparte lo más relevante con los padres de familia y se les ofrecen herramientas para seguir acompañando a sus hijos en estos temas.
¿Cómo reciben los chicos y chicas este tipo de formación? ¿Les interesa?
Hay reacciones de todo tipo, sobre todo al principio. Una vez avanza el curso se dan cuenta de la importancia que tienen estos talleres. Todos los adolescentes más o menos tienen las mismas inquietudes, estos talleres ayudan a orientarles en el deseo de amar y de ser amado que está inscrito en nuestro corazón y en nuestro cuerpo.
¿Qué sacan los jóvenes de esta formación? ¿Les ayuda a reorientar su vida y a orientar sus afectos en medio de la multiplicidad de estímulos que reciben en la sociedad?
Los adolescentes a través de estos talleres adquieren habilidades que fomentan su autoestima y asertividad, elementos claves para desarrollar una actitud crítica frente a la presión grupal y social. Así, desde una sana personalidad, pueden ser capaces de tomar decisiones libres y responsables.
