Bea ha estudiado en Highlands School El Encinar, fue niña ECYD y responsable durante toda la ESO y el Bachillerato. Tiene 22 años y estudia en la universidad. “Intento estar a la escucha para responder con mi vida a lo que me pida, consciente de que necesito su gracia en todo momento”. Nos cuenta cómo vive el Regnum Christi como joven: la vida de equipo y en la sección, su vida de oración y relación con el Señor, o su apostolado, íntimamente vinculado a escuchar al Espíritu Santo

¿Cómo conociste el Regnum Christi? ¿Hubo alguna persona o alguna experiencia que te atrajese especialmente?

Lo conozco desde pequeña y siempre ha estado muy presente en mi vida. Unas de las cosas que más me abrió a la vida del Regnum Christi fue poder tener dirección espiritual desde el colegio. Ese acompañamiento fue clave para mi relación con el Señor y para poder conocer la vida del Reino.

¿Cómo vives tu relación con Cristo en el día a día desde tu incorporación? ¿Ha cambiado algo en tu vida?

La incorporación fue otra confirmación de que Dios es fiel y sigue haciendo su obra en mi. Intento estar a la escucha para responder con mi vida a lo que me pida, consciente de que necesito su gracia en todo momento.

Una de las prioridades del Regnum Christi es la de “ser y formar comunidades de apóstoles”. ¿Cómo es tu vida dentro de una sección de jóvenes? ¿Qué actividades o momentos destacarías?

Estoy dentro de la sección de Almagro y tengo un equipo de encuentro los martes. Voy algunas veces ahí a dirección espiritual y trato de participar y ayudar en las actividades que haya. Agradezco especialmente las misiones que he hecho con la sección en Perú hace dos años y en Canarias el año pasado, y por supuesto con mi familia en Familia Misionera. Fueron momentos claves en mi intimidad con el Señor, para meterme más en la vida de la sección y confirmar mi sitio en el Regnum Christi.

¿Qué papel tienen ahora en tu vida la oración, la formación o el apostolado?

Siempre he tenido mucha inquietud por formarme y conocer. Cada vez siento más la necesidad de dar aquello que se me ha dado como don. Sobre la oración, he ido descubriendo que se trata de esa presencia diaria del Señor, que nos bendice en cada momento y nos abre a Él. Ha habido muchas personas que me han ido enseñando esa intimidad con Cristo como forma de vida.

He estado metida en varios apostolados, pero ahora estoy en uno más nuevo que se basa en llevar la vida en el Espíritu al Regnum Christi. Somos un grupo pequeño que busca estar a la escucha del Espíritu Santo para que Él nos vaya guiando en un camino de identidad, sanación y de estar abiertos a las gracias que derrame y las necesidades que inspire. Hacemos alabanzas y también ayudamos en los retiros de ID.

¿Nos puedes recomendar un libro, un pasaje del Evangelio, una canción… que te hable de Cristo y te llene de Él?

Diría que el libro de Historia de un alma de Santa Teresa de Lisieux con su camino de confianza, sencillez y grandes deseos. Muestra cómo el Evangelio es la revelación de la ternura y la bondad de Dios, y que lo importante es acogerlo y dejarse transformar por ese amor.