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La Conferencia Episcopal valora el Informe del Defensor del Pueblo sobre abuso sexual en la Iglesia y prepara un itinerario para implementar las recomendaciones

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También los obispos, como la CONFER, se pronunciaron sobre el Informe del Defensor del Pueblo. El 30 de octubre celebraron una Asamblea Plenaria extraordinaria de la Conferencia Episcopal Española “centrada en la cuestión de los abusos sexuales cometidos por miembros de la Iglesia”, dicen en nota de prensa. Tuvo dos puntos en el orden del día: valorar el informe del Defensor del Pueblo, y estudiar la petición del Despacho Cremades & Calvo Sotelo para ampliar el plazo de entrega de la auditoría sobre los abusos en la Iglesia española que le encargó la CEE.

“Los obispos presentes han manifestado su dolor por el daño causado por algunos miembros de la Iglesia con los abusos sexuales y reiteran su petición de perdón a las víctimas”, explican en la nota. “Asimismo, han manifestado el deseo de trabajar conjuntamente en la reparación integral de las víctimas y profundizar en los caminos para su protección, su acompañamiento y la prevención de los abusos”, explican.


Sobre el informe del Defensor del Pueblo

En su análisis del Informe del Defensor del Pueblo, dicen los obispos en la nota de prensa, “han realizado una primera aproximación a su trabajo valorando, de manera especial, el testimonio recogido de las víctimas, lo que permite situar a las víctimas en el centro. Se han considerado también valiosas las recomendaciones propuestas en este informe”, aseguran.


“Partiendo de esta realidad, la Asamblea Plenaria se une a la petición del Defensor del Pueblo que urge al Estado a poner en marcha las recomendaciones que el informe realiza a sus distintas instituciones, para asumir su responsabilidad en la tarea conjunta de poner fin a esta lacra que afecta a toda la sociedad, como señala el mismo informe. Dejar de tener en cuenta la magnitud del problema y su dimensión mayoritariamente extraeclesial, supone no afrontar las causas del problema y perpetuarlo en el tiempo. Además, poner el foco exclusivamente en la reparación de las víctimas de la Iglesia, discriminaría a la mayoría de las víctimas, a las que convertiría en víctimas de segunda”, afirman.


Al mismo tiempo, manifiestan su “sorpresa” por “la extrapolación que se hace de los datos obtenidos en una encuesta adjunta al informe” del Defensor del Pueblo. Según los obispos, “No corresponden a la verdad ni representan al conjunto de sacerdotes y religiosos que trabajan lealmente y con entrega de su vida al servicio del Reino”.


El Informe del Defensor del Pueblo incluye un estudio demoscópico a partir de una encuesta a 8.013 personas para estudiar la prevalencia del abuso sexual contra menores de edad en la Iglesia Católica y en el conjunto de la sociedad. Un 0,6% de los encuestados afirmó haber sido víctima de abusos por un religioso y clérigo, un 1,13% haber sido víctima de abusos en un entorno religioso, y un 11,7% haber sido víctima de abuso sexual en su infancia. El hecho de extrapolar los porcentajes a cifras globales ha sido un tema discutido, y el propio Defensor del Pueblo durante la rueda de prensa lo abordó para explicar por qué en el Informe no lo habían hecho y por qué.

Puesta en marcha de las recomendaciones recibidas

En relación a las recomendaciones propuestas por el informe del Defensor del Pueblo, los obispos de la Asamblea Plenaria han constatado que, “en buena medida, son convergentes con otras propuestas trabajadas en la CEE desde ya hace algún tiempo”.


Han decidido encargar al Servicio de Protección de Menores de la CEE “el itinerario de la aplicación de las recomendaciones del Defensor del Pueblo, en relación a los cauces de reparación, prevención y formación”, y aseguran que “será ya implementado en la próxima Asamblea Plenaria de noviembre”.


Un problema que va más allá de la Iglesia

Los obispos en su nota vuelven a reiterar que “los abusos sexuales a menores son un problema social al que todas las instituciones públicas y privadas tiene el deber de dar respuesta”, “que un solo caso de abusos es intolerable”, y que “la Iglesia católica en España lleva años trabajando en poner fin a esta lacra y va a seguir trabajando en la misma línea”, incorporando a su esfuerzo diario las recomendaciones del Defensor del Pueblo.


“La Iglesia quiere contribuir a erradicar los abusos sexuales en la infancia no solo en la Iglesia sino en toda la sociedad y pone al servicio de la misma su triste experiencia para hacerlo, con espíritu de colaboración”, aseguran.


Sobre la auditoría encargada al despacho Cremades & Calvo-Sotelo

En relación a la auditoría encargada al despacho Cremades & Calvo-Sotelo, “los obispos han escuchado la solicitud y la motivación para la ampliación del plazo de su auditoría, que ha presentado el presidente del Despacho, Javier Cremades”, y han decidido posponer a la próxima Asamblea de noviembre la decisión sobre la encomienda realizada al despacho Cremades&Calvo Sotelo en el mes de febrero de 2022.

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